Sentir molestia en las piernas es un problema muy extendido durante los nueve meses. Lo que puedes hacer para sentirlas ligeras y tónicas
Durante el período del embarazo sucede que con frecuencia el retorno venoso de la sangre hacia el corazón resulte más difícil. Durante los nueve meses las venas pueden perder tonificación y elasticidad, con la consecuencia de que las paredes venosas ceden y se dilatan, a la sangre le cuesta volver a subir hacia arriba y tiende a estancarse en las venas. Esta molestia puede provocar, además de una sensación de pesadez en las piernas, también la aparición de varices (venas dilatadas) y capilares evidentes, desde el primer trimestre. Las responsables son precisamente las hormonas, que actúan relajando las paredes venosas.
Al avanzar el embarazo por desgracia las molestias de este tipo empeoran, porque aumenta el volumen de la sangre que circula por las venas. Los calambres, están provocados por espasmos musculares, ya que también los músculos están afectados por un exceso de producción hormonal.
Algunos consejos para mejorar la situación:
– levanta las piernas cuando descanses para facilitar el retorno venoso: puede serte útil colocar un cojín debajo del colchón;
– realiza una moderada actividad física;
– no permanezcas de pie durante mucho tiempo;
– usa medias elásticas que estimulan la circulación sanguínea gracias a la compresión graduada decreciente;
– lleva zapatos con el tacón medio, lo ideal es que tenga entre 3 y 5 centímetros, para ayudar así la subida de la sangre hacia el corazón.