Tu vientre será el protagonista indiscutible de tu boda: elige un vestido que lo valorice y que te haga sentir cómoda y a gusto.
Las ceremonias de boda con “vientres a la vista” están aumentando desde hace algún tiempo: cada vez son más las parejas que deciden casarse antes del nacimiento de su pequeño para poder disfrutar de la ceremonia primero, y concentrarse en el pequeño después.
Para un hombre cambia poco, un traje de ceremonia y listos, pero ¿y para la futura mamá? ¿Qué vestido elegir para el día más importante de tu vida?
Consejo número uno: tu vientre será tu punto fuerte. Por suerte hoy la moda está muy atenta y derrocha creatividad en los vestidos premamá, los tiempos de chándal y peto para todas las ocasiones por fortuna se han acabado y son muchos los estilistas de vestidos de novia que proponen también modelos para las mujeres en estado de buena esperanza.
El corte imperio es el más popular porque es el que mejor se adapta a tus formas en este momento especial, proporcionando gracia y comodidad al mismo tiempo. Si lo prefieres muy sencillo, puedes enriquecerlo eligiendo accesorios (pendientes y pulseras por ejemplo) más importantes y vistosos: ¡en seguida te sentirás de lo más chic!
Para el maquillaje es mejor elegir algo ligero y natural: tu rostro ya está iluminado por la alegría que sientes en espera de tu pequeño. Resalta tu sonrisa suave y los ojos brillantes, pero asegúrate de que los productos utilizados para tu make-up sean a base de productos naturales.
Por último los zapatos, últimos de la lista pero no por ello menos importantes. La altura óptima del tacón es 4-5 cm, perfecta para la espalda. Mejor que no sean demasiado finos. También en este caso la moda viene en tu ayuda: ¡cuñas y plataformas bien formadas son soluciones adecuadas para esta ocasión!