Descubre cómo seguir en forma y llegar bien tónica al parto.
Intentar mantener tu físico “ligero”, suelto y lleno de energía es un óptimo objetivo que perseguir durante los nueve meses del embarazo porque te permitirá afrontar con mayor facilidad el parto.
En primer lugar intenta no coger demasiado peso: esto no significa que te obsesiones con los kilos que ¡naturalmente aumentan con el pasar de los meses! El aumento de peso podría cansarte más fácilmente y darte algunas molestias. Es suficiente prestar un poco de atención, sobre todo cuando los antojos llegan a veces de manera imprevista…
Por ejemplo, un buen paseo por el parque “quema” las calorías de una porción de tarta a la que no has podido renunciar, quizá después de un momento de estrés provocado por tu jefe…
De hecho una actividad física moderada es sin duda “mano de santo” porque consigues trabajar sobre todas las partes del cuerpo más solicitadas durante el embarazo, previniendo así los típicos dolores y contribuyendo además a tu bienestar psicofísico.
Son muchos los deportes que puedes decidirte a practicar: desde el yoga hasta el pilates, desde el acquagym hasta la natación. Las actividades que se desarrollan en el agua están especialmente recomendadas, ya que la ausencia de gravedad hace que los movimientos sean más fáciles.
Si puedes, elige un tipo de gimnasia que se concentre sobre todo en los abdominales y en la columna vertebral: en este sentido el pilates es ideal ya que trabaja de manera específica sobre los abdominales, con lo que te ayuda a reforzar la espalda y a aumentar tu percepción de los principales músculos implicados durante el parto.
Antes de comenzar cualquier tipo de actividad física consulta con tu ginecólogo para pedir su consejo y estar más tranquila y serena. Recuerda que para mantenerse en forma no es necesario ir al gimnasio: algunos ejercicios se pueden hacer tranquilamente en casa.
Subir las escaleras andando por ejemplo es un excelente ejercicio para el sistema cardiocirculatorio; dar un buen paseo activa todos los músculos y levantar botellas de agua ¡refuerza los brazos! Naturalmente sin exagerar…