Existen métodos “alternativos” que permiten reducir los dolores del parto, garantizando asistencia médica si fuese necesario. Sin embargo, no todos los hospitales ofrecen esta posibilidad.
En nuestro país el momento del parto está especialmente medicalizado: esto permite por una parte asistir mejor a la madre y al bebé sobre todo en caso de necesidad, pero por otra parte quita un poco de espontaneidad al evento. Durante los últimos años muchos hospitales han decidido introducir la filosofía del parto natural: quiere decir que, junto a la asistencia médica, se ofrece a la madre la oportunidad de secundar sus sensaciones y de probar durante las contracciones y el parto algunas técnicas alternativas que pueden reducir el dolor de las contracciones. Los partidarios del parto natural afirman que este tipo de parto permite una serenidad mayor y una recuperación psicofísica de la madre y del bebé más rápida.
Entre estas técnicas tenemos:
- el parto en agua: se realiza en una bañera de agua caliente, en la que la mamá se sumerge tanto durante las contracciones como durante la fase expulsiva. El calor alivia el dolor de las contracciones. En Italia está más difundido pasar solo las contracciones dentro del agua.
- el training autógeno respiratorio: a través de una técnica particular, el training autógeno, aprendido durante el preparto, la mujer puede aliviar el dolor de las contracciones visualizando imágenes agradables y trabajando sobre la respiración.
- el yoga: se trata de una técnica muy antigua, que busca el perfecto equilibrio entre el cuerpo y la mente. Los ejercicios de yoga permiten relajar y distender los músculos: por eso algunas posiciones del yoga son muy útiles durante el parto para aliviar el dolor de las contracciones.
- la hipnosis: esta técnica permite a la madre relajar la mente y eliminar del cerebro la percepción del dolor. Es una técnica que se aprende con paciencia y en centros especializados.