Después de tantos meses pasados en descanso, tus ovarios recuperan su normal funcionamiento y llega la primera menstruación después del nacimiento de tu bebé.
Ahora que tu bebé está entre tus brazos, mimos, papillas, sueño son las nuevas citas diarias que, a pesar de la fatiga inicial, te llenan de felicidad. Ahora es también el momento de los loquios, un proceso natural y fisiológico que dura hasta seis semanas después del parto y que consiste en pérdidas de color rojo intenso al principio y poco a poco cada vez más claras. A través de este proceso fisiológico tu cuerpo expele los residuos de la placenta y las células epiteliales; transcurridas algunas semanas los “loquios rubros” dejan el lugar a los “albos”, caracterizados por un color blanco y opaco y que duran aún durante algunas semanas.
Terminados los loquios, ¿cuándo volverá la regla? La primera menstruación después del embarazo y el nacimiento de tu bebé podría llegar aproximadamente cuarenta días después del parto, pero puede que se haga esperar hasta varios meses, si das el pecho a tu bebé. Esta menstruación te indica que tus ovarios ya han vuelto completamente al trabajo y se presenta con un flujo muy abundante durante cuatro o cinco días. Después de tantos meses en descanso el tejido del endometrio se ha espesado y las pérdidas serán muy abundantes para volver a las “condiciones de partida”, pero en los meses sucesivos las menstruaciones se normalizarán, volviéndose regulares tanto en la cantidad como en la frecuencia.
Si antes del embarazo sufrías de dolores menstruales es probable que después del parto tu ciclo sea menos fastidioso y más regular, gracias a la producción hormonal más regular que sigue al descanso de tus ovarios durante algunos meses.
¡Pero si no llega la menstruación no te preocupes! En las madres que dan el pecho pueden hacerse esperar incluso hasta ocho meses, o durante todo el período en el que tu pequeño necesite tu leche de manera exclusiva. Cuando comiences el destete y disminuyan las tomas, volverán a aparecer las menstruaciones: al reducir las tomas disminuye también la síntesis de prolactina, una hormona que inhibe la producción de folículos y la ovulación.