¿Cuáles son las pruebas que se realizan durante los últimos meses antes del parto?
Desde que descubriste que estabas embaraza, se han sucedido una serie de controles y visitas, para tener bajo control tu salud y la del bebé. Cuando se acerca el parto, es natural que estos controles se realicen con mayor frecuencia a pesar de que, dependiendo del desarrollo de cada embarazo, podrán ser necesarias pruebas diferentes.
Según cuanto establece el decreto ley n. 245 del 1998 se realizan los análisis de sangre, entre la 28ª y la 32ª semana de embarazo: es conveniente saber que si se realizan en estructuras públicas o concertadas con el sistema sanitario nacional, son gratuitos.
Normalmente se pide el hemocromocitométrico, para controlar la cantidad y el porcentaje de glóbulos blancos y de glóbulos rojos y la concentración de la hemoglobina y comprobar que no sufras anemia. Se mide también la ferritina, que consiste en la valoración de la cantidad de hierro de “reserva” a disposición del organismo, que durante el embarazo tiende a disminuir y por esto es necesario tenerlo constantemente controlado.
En esta fase también deberás repetir el análisis de orina para excluir la presencia de problemas como la gestosis, la diabetes de embarazo o una infección bacteriana de las vías urinarias.
También estos análisis son gratuitos siempre que se realicen en una estructura pública o concertada.
En el tercer trimestre se realiza también, durante las mismas semanas, la ecografía del tercer trimestre, llamada biométrica, que valorará que tu pequeño esté creciendo bien en relación con la edad gestacional.
Durante el último trimestre, en ocasión de la visita, el ginecólogo te preguntará si has sufrido malestares durante esta última fase, controlará cuánto peso has aumentado, medirá la tensión arterial, verificará la dilatación del cuello del útero, medirá el latido cardíaco de tu bebé y se informará sobre los movimientos fetales. Es la ocasión para exponer todas tus dudas y pedir información sobre el parto.
Solo se solicitan otras pruebas, como el tampón vaginal o el monitoreo cardiotocográfico en presencia de algunas condiciones: será el ginecólogo quien te diga qué hacer y cuándo.