Ha comenzado para ti un viaje extraordinario que durará 10 meses lunares, cada uno de 28 días, ¡emocionante y lleno de esperanzas!
La duración del embarazo se indica normalmente en nueve meses + una semana. Tu ginecólogo te hablará en términos de semanas ya que la semana es el intervalo que más se parece al ritmo de crecimiento de tu hijo: 40 en total. Sería como decir que el embarazo dura 10 meses lunares, de 28 días cada uno.
Se considera como inicio de la gestación el primer día de la última menstruación, fácil de reconocer y de recordar, mientras que la época de la concepción se calcula solo por curiosidad porque es bastante variable e imprevisible dependiendo de cada mujer y de cada ciclo.
Claro que una de las primeras preguntas que te habrás hecho cuando has descubierto estar embarazada habrá sido “y entonces ¿cuándo nacerá?”. En realidad saber con exactitud la fecha del parto es casi imposible. El momento que tu pequeño elija para nacer es fruto de circunstancias diversas y no de un simple cálculo matemático, pero normalmente el período más probable es el comprendido entre los 15 días anteriores y los 15 días sucesivos a la fecha prevista.
Siempre a propósito de luna, cuando hayas identificado la fecha, algunos podrán sugerirte que eches una ojeada a las fases lunares de aquel período: es una opinión difundida que el nacimiento pueda ocurrir en cada cambio de fase lunar.
Ahora que esperas un hijo has entrado en una nueva dimensión: entusiasmos, trepidaciones, curiosidad por lo que te está ocurriendo. Puedes conservar a partir de ahora tus pensamientos y tus emociones y entregarlos a tu diario, preparando un regalo verdaderamente especial para tu hijo. Un día podrás entregárselo y decirle: “Así era tu mamá cuando tú aún no estabas aquí. ¡Así te deseaba antes de que llegaras!”