Tener relaciones sexuales no es peligroso si mamá y papá tienen ganas, es más, en algunos casos puede ser ventajoso, sobre todo en vista del parto.
No hay una regla ni un cuadro de marcha que seguir cuando se habla de amarse, todavía menos durante el embarazo. Os corresponde a tu compañero y a ti decidir si y cuando tener relaciones. Hay parejas que no renuncian a su intimidad durante los nueve meses y otras que prefieren por el contrario no “violar” en un cierto sentido la pureza de este momento.
Lo que hay que saber es que no existen contraindicaciones, a menos obviamente que no las señale el médico.
Por lo tanto es posible tener relaciones durante toda la gestación.
Durante el último mes en particular, el aumento del volumen de tu vientre podría inhibir la intimidad de la pareja. Aquí tienes algunas indicaciones útiles si no deseáis renunciar al sexo durante el noveno mes:
- por lo que concierne a la posición más cómoda, os corresponde a vosotros naturalmente experimentar la que mejor os vaya, a pesar de las dimensiones del vientre;
- vuestro bebé no advierte nada, así que no se debe temer hacerle daño: está bien protegido por la placenta y por el líquido amniótico;
- El esperma se ha demostrado útil para facilitar la aparición de las contracciones, por lo que si se ha superado la fecha del parto se pueden aumentar las relaciones también para favorecer el nacimiento del bebé;
- Por último, lo más importante de todo, el buen humor, la relajación y las sensaciones positivas que regala el sexo solo pueden hacerle bien a la futura mamá, al futuro papá y, por consiguiente, a vuestro pequeño.