La piel de tu pequeño es muy delicada y sensible, y pueden afectarla fácilmente los enrojecimientos y los eritemas: no te asustes, se trata de problemas comunes.
El uso del pañal obliga a la piel del culito de los más pequeños, a permanecer en contacto durante mucho rato con el pipí y la caca que desafortunadamente contienen sustancias irritantes. Esta acción negativa aumenta con la humedad en el interior del pañal, que disminuye aún más las defensas de la piel, haciendo que se enrojezca y se agriete.
La dermatitis por lo general es ligera y tiende a desaparecer rápidamente. Con un poco de atención puedes intentar prevenirla o reducirla.
- Comienza por elegirpañales muy absorbentes y lo más transpirables posibles.
- Sobre todo si tu pequeño se está preparando para que le salgan sus primeros dientes, intenta cambiarlo con frecuencia porque en estos momentos sus descargas son especialmente ácidas e irritantes.
- Lávalo siempre con cuidado, eliminando todo el jabón: los restos de jabón, pueden provocar irritaciones.
- Si su piel es muy delicada, no uses talco ni sustancias como aceites y lociones que se absorben rápidamente. En estos casos es mejor utilizar pomadas con óxido de zinc,muy eficaces tanto para aliviar la piel irritada como para crear una barrera protectora que obstaculiza la acción negativa del pipí y la caca.
Si la dermatitis empeora y se agranda no dudes en pedir ayuda a tu pediatra, que te aconsejará la pomada más adecuada para cuidar a tu hijo.
Puede ocurrir que la piel esté debilitada por la dermatitis, y que la ataque un hongo, llamado Candida Albicans, que, desde la boca, atraviesa el intestino y encuentra en la humedad del pañal el ambiente ideal para proliferar, provocando un fastidioso eritema. Se trata del famoso muguete pero no te alarmes: el pediatra te recetará una pomada anti-hongos específica que permita una perfecta curación ¡de tu culito preferido!